Un grupo de amigos de entre 15 y 17 que anteriormente formaron una peña juvenil llamada “El Perol” (no oficial) decidieron en el año 1964 formar una peña vaquillera. Aunque jóvenes y en su mayoría estudiantes, ya había alguno que estaba tabajando en diversas empresas y comercios de la ciudad. El nombre de la peña se decidió por votación y entre unos cuantos que se presentaron resultó ganadora la palabra “Kuadra” con lo que el tema con dicho nombre quedó cerrado. Fueron unos 30 los socios el primer año. Tuvo una duración entre las peñas vaquilleras de cinco años pues salió en el año 1964 y desapareció terminada la Vaquilla de 1968.
La peña vaquillera “El Viti” nace por una serie de contactos y conversaciones entre varios amigos en 1961, en la Plazuela del Arrabal, siendo el punto neurálgico de dichas reuniones la peluquería de caballeros allí establecida y que regentaba Manuel Izquierdo Torres “El Niño”. Como entre los amigos había gente relacionada con el toro se propuso llamarla peña “Arrabalera El Viti”. ¿Porqué llamarla de ese modo? Pues bien, los amigos ya habían apuntado la posibilidad de escribir directamente al torero o a su representante una carta en la cual se expondrian las intenciones de la peña de llevar su nombre y si a estos les hubiese parecido bien, que les hubiesen subvencionado con una cantidad en metálico para ayudar al funcionamiento de la peña. Nada de esto ocurrió y la gente el segundo año se sintió muy desilusionada, desapareciendo la peña nada más terminar la Vaquilla. Salió en 1961 con mucha gente en sus filas y dejó de salir una vez terminada la Vaquilla de 1962.
De 1948 a 1958 estuvo la peña en su primera etapa. Primera peña vaquillera en que todos componentes pertenecían al mismo barrio, en esta ocasión al Arrabal. Como decía mi buen amigo “El Chato” (Miguel Torán) primer presidente que tuvo la peña “…para no andar con rodeos, le pusieron por nombre “El Trago” porque nos gustaba bebernos unos cuantos chatos de vino, ya fuera en vaso, en bota o en barral”. Como cosa curiosa en un principio se solían reunir los sábados y domingos del año en la famosa cantina “La Majica”.
Don Manuel Esparrells Ferrer, tenía mucha ascendencia sobre los educandos de la Banda Municipal de Música. En el año 1948, se formó bajo su supervisión la orquesta “Los Marinos”, en honor a los año en que estuvo en la Marina Española durante el servicio militar. Tres años después, en 1951, estos chavales de la orquesta y algunos amigos más, decidieron formar la peña vaquillera a la que por supuesto le pusieron el mismo nombre que a la orquesta, “Los Marinos”. La peña salió por primera vez el año 1951 y se mantuvo hasta 1961. Después de un impás de ocho años volvió a salir en 1969 hasta nuestros días.
Un grupo de chavalines de entre nueve y diez años y amiguicos del colegio, llegadas las fiestas de la Vaquilla decidieron en el año 1961 formar una peña vaquillera infantil. Bajo la supervisión de sus padres buscaron un pequeño local donde reunirse y lo encontraron en la calle San Francisco. El nombre de la peña lo aportó uno de ellos que era asiduo a las fiestas de Huesca y lo cogió de una de esas. Pero la peña sale oficialmente como tal en el año 1967 cuando se forma en Teruel la Asociación Turolense de Peñas Vaquilleras. Fueron en ese año 30 socios y la peña, con la salvedad de un año, ha salido todos desde su creación en 1967.
El problema de la masificación de las peñas a principios de los años noventa y que coincide también con la creación de la Asociación Cultural Interpeñas, mueve nuevamente a un grupo de jóvenes vaquilleros pertenecientes en su mayoría a la peña “El Ajo” a crear en el año 1992 una nueva peña vaquillera de común acuerdo con los dirigentes del “Ajo”, que vieron como se aligeraba la peña, la cual había llegado a saturarse más de la cuenta. Uno de los puntos álgidos fue encontrarle nombre a la nueva peña. La idea original era llamar a la peña “Los Pericones”, que era el mote que recibían el grupo de amigos, pero viendo los pros y los contras, comprendieron que posiblemente a la gente no les gustase dado que la palabra que definía mucho a un grupo concreto, por lo que tras varias deliberaciones salió a relucir el nombre de “El Disfrute”. La peña salió en el año 1992 y contó ese año con la nada despreciable cantidad de socios de 208. Aunque solamente se recoge un año en esta historia, la peña siguió su curso.